Un hombre que habitaba en Detroit desde hace 30 años ha sido deportado de regreso a México.
Jorge García llegó a los Estados Unidos con su familia cuando tenía 10 años de edad. No tiene antecedentes criminales, paga impuestos y ha buscado por mucho tiempo el estado legal, de acuerdo a su familia. El hombre de 39 años fue deportado a México y no puede regresar a los Estados Unidos por un lapso de 10 años.
García se había enfrentado a una orden de expulsión de los tribunales de inmigración desde 2009 pero se le habían otorgado suspensiones durante la administración del ex presidente Barack Obama.
Garcia se enteró de que estaba programado a ser deportado como parte de una campaña de inmigración de la administración del presidente Donald Trump.
Una petición de la republicana Debbie Dingell atrasó esta deportación para que Garcia pudiera pasar las celebraciones con su familia, su esposa y sus dos hijos, todos ellos de nacionalidad estadounidense.
“Ni siquiera quisimos poner un árbol de navidad porque era muy triste el llegar hasta ese punto“, dijo la esposa, Cindy Garcia. “Fue duro porque sabíamos que iba a partir de manera eventual. Lo único que podíamos hacer era recordar“.
Jorge García ya es muy grande para entrar al programa de Acción diferida para llegadas infantiles, el cual permite a jóvenes inmigrantes que viven el país de manera ilegal que fueron traídos a Estados Unidos de niños para trabajar y estudiar.
“Tengo que dejar a mi familia atrás, sabiendo que ellos probablemente tendrán que pasar un tiempo ajustándose“, dijo Garcia. “El no poder estar con ellos por quien sabe cuanto tiempo. Es muy duro“.