5 clases de estudiantes y un modelo de vagancia

Rufo "astragado"Amigos vagos, ya sabéis que en estos 15 aí±os de profesión intentando ayudar desde vuestra página favorita para bajar apuntes, trabajos, resíºmenes y tareas para escolares, nos hemos encontrado con todas las especies posibles de las que pueblan las aulas alrededor de prácticamente todo el mundo.





Esto que te vamos a decir hoy no es una categorización “cerrada”. Seguramente tíº conozcas muchos más tipos de estudiantes, diferentes personalidades con las que convives dí­a a dí­a cuando vas a clase. No sé si, incluso, te atreverí­as a incluirte en alguna de estas etiquetas.

El “astragado”

El astragado es aquel empollón que vive, come, actíºa y sueí±a por y para los estudios. De verdad, su meta en la vida es estudiar, y nada más allá. No conoce ni le interesa cualquier otro aspecto de la vida y cuando acabe la universidad tendrá un problema grande, pues ha ignorado las relaciones sociales, las diversiones, carecerá de aficiones, y no sabrá con qué llenar huecos que dejaron los libros. Quizá siga estudiando alguna carrera más, aí±orando volver cada maí±ana a las aulas.

El “lamentos”

Es el quejica de tu clase. Si el empollón anda todo el dí­a a lo suyo, dale que te pego y estudiando sin relacionarse con los demás, insensible a todo, el “lamentos” disfruta yendo a por ti para agobiarte con sus penas: “esto no me lo sé”, “maí±ana no voy a aprobar el examen”, “tengo muy mala suerte en la vida” y todo así­. Curiosamente, nota comíºn de todos estos quejicas es que suelen sacar mejor nota que tíº en un examen del que aseguraban no tener ni pajolera idea. Mira, tíº no estás para que nadie te ande contagiando pesimismo, así­ que a estos ejemplares, ¡lejos!

El “pasota”

Este ser es realmente peligroso. A diferencia del “lamentos” que se queja de postureo y luego le van bien las cosas (disfruta transmitiéndote agobio), el “pasota” es que “pasa” de verdad. Le da igual todo y no tiene interés por nada, ni por su futuro. El principal problema del “pasota” es que al final está estudiando más tiempo del que él quisiera porque hay una cosa de la que no es capaz de pasar, y es de curso. Sin duda, para este tipo de alumno, ir a clase es una especie de castigo eterno y circular.

El “cinquillo”

Lo llamamos así­ porque su misión en la vida es el 5, la nota que le sirva para ir pasando de curso y obtener el tí­tulo, sin más pretensión. El “cinquillo” suele tener en mente lo que le espera al acabar los estudios y le vale lo justo para llegar a eso. No se desafí­a a sí­ mismo ni se pone retos personales, no ha venido al colegio, al instituto o a la universidad para hacer amigos ni para disfrutar de la experiencia o de los aí±os de estudiante. Muchos tenemos la tentación de ser como él, pero tenemos   que sacar el jugo a todos los momentos que vivimos en la vida ;-)

El “pelota”

A este le tienes identificado de sobra. Se diferencia en una cosa básica con el “astragado”, aunque a veces se mezclan los caracteres. El “astragado” puede pelotear a los profes, al director, al decano, a toda la cíºpula académica… pero curra, está todo el dí­a currando. El “pelota” no da un palo al agua y toda su estrategia se basa en conseguir el favor del profesor de turno. ¡Es muy cansado ser “pelota” si no tienes vocación para ello!

El “vago”

Un modelo de vagancia que promovemos en Rincón del Vago es el modelo del “vago eficaz”. Es el vago que está pendiente de sus amigos y de disfrutar de la vida mientras organiza de forma productiva sus estudios, pero sin que los libros, los apuntes, el mundo académico sea su preocupación. Nuestros vagos usan técnicas de estudio para ahorrar tiempo y saben dónde encontrar recursos académicos de calidad para solventar aquellas tareas que son totalmente banales o que no conducen a nada. Mientras tanto disfrutan de esta etapa de su vida y de sus compaí±eros, son solidarios y comparten.

¿Cuál es tu rollo? ;-)

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