Venciendo la pereza para ser más productivos
Un buen día por la maí±ana me levanté de la cama y dije “Dejo de fumar“. Y tiré el paquete de cigarrillos a la basura. No necesité ningíºn tratamiento ni me sometí a ninguna terapia. Dije “Dejo de fumar” y lo hice. Por supuesto, estuve a punto de caer en la tentación del tabaco muchas veces, pero segíºn le ganaba batallas día a día, vi que podía vencer al enemigo de mi adicción.
Otro buen día, decidí empezar a correr, para hacer algo de deporte con más frecuencia. Y se fue convirtiendo en un vicio que me recarga las pilas y me llena de energía cuando me bloqueo o me estreso. Llevo ya 7 aí±os haciéndolo. Se necesita la misma fuerza de voluntad para derrotar una adicción o para ser disciplinado en la práctica deportiva. Tíº tienes la clave. Querer hacerlo.
Las grandes cosas de la vida se deciden de un día para otro. No es imprescindible la rapidez, pero sí la firmeza. No se puede tomar decisiones si se tiene miedo. Una vez extraído o mitigado ese miedo, ese temor reverencial a avanzar a territorio desconocido o en el que salimos de nuestra zona de confort, tu decisión te lleva implacablemente a hacer todo lo que uno puede hacer para ejecutarla. Uno rompe barreras y hace cosas de las que se creía incapaz con tal de salirse con la suya. No hay brujería, ni rollo raro, ni escarmiento, ni nada: solo tíº y tu fuerza de voluntad. Así se forjan los caracteres ganadores.
Así queremos que empieces tu camino productivo si no lo has hecho ya. Dejando que el miedo abandone tu cabeza y permitiendo que una simple decisión tranquila te lleve al cambio.
Todo, para que un buen día, por la maí±ana, te levantes y digas “Se acabó la pereza; voy a ser productivo“, para no tirar tu tiempo libre por la basura, para aprovechar mejor las horas de estudio y subirte al carro de la organización, porque estás harto de quedarte bloqueado en tus apuntes y ser incapaz de avanzar en tus lecturas. Y también, claro está, para que dentro de unos cuantos aí±os cuentes a otros tu historia. Ojalá que sea una historia de éxito y superación.
Amen!!
Tal como lo cuenta esta nota, vivà una situación similar. Me inicie en el cigarrillo a los catorce años y a los veintitres, fumaba dos atados de cigarrillos por dÃa. Tomé conciencia un dÃa, al volver de vacaciones a trabajar y correr media cuadra para alcanzar el colectivo, estaba totalmente sin aire y me dolÃa el pecho. TenÃa un atado que habÃa comprado el dÃa anterior y me quedaban cinco cigarrillos, lo miré y me dije: “se acabó, me estoy matando, no fumo más”. Conservé ese atado durante varios años en un cajón, como recuerdo, también como en el caso de la nota, las primeras semanas fue dificil y hasta varias veces no solo estuve a punto de caer, sino que probé algún cigarrillo, pero me recuperé. Hoy se han cumplido más de treinta años que lo dejé y esto lo he replicado en otras situaciones en mi vida, como por ejemplo, en mayo de este año me recibà de Analista de Sistemas. Hace tres años acompañé a mi hija a anotarse en la carrera que querÃa estudiar y và que en ese lugar también dictaban la carrera de Analista de Sistemas, era un tema pendiente en mi vida ya que, por una causa o por otra nunca pude completar mis estudios varias veces iniciados y otras tantas abandonados. Lo pensé y dije ¿porque no? Me anoté y me propuse completarlo en tres años y asà fué. Me costo mucho sacrificio teniendo en cuenta mis cincuenta y siete años, una familia a cargo y mis magros ingresos. En más de una ocasión estuve a punto de abandonar y hasta se lo plantee a mi familia, pero seguà adelante luchando un dÃa a la vez y hoy ya tengo mi tÃtulo en la mano y me siento orgulloso de haberlo logrado…
excelente muchas felicidades!!!!!! una linda historia de superacion personal nunca es tarde!!!!!gracias por compartir tu historia
si que linda historia
Eso es todo amigo Fernando que buena actitud:)
Nunca es tarde para restablecer el camino con una gran voluntad, ya que la vida continua….! :)
claro que si es todo un reto-……