¿Las ardillas realmente vuelan?
Más de una vez hemos visto a las ardillas ir de un árbol a otro, pero, ¿volarán?
Las ardillas voladoras en realidad no pueden volar, solo usan aletas en la piel entre sus extremidades para deslizarse se árbol en árbol, pero a menudo parece que sí podrían hacerlo.
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El patagio es el pliegue de la piel que va de la muñeca hasta el tobillo, ese es el que les permite el modo de planeo. Así, las ardillas se deslizan en una curva descendente hasta llegar a otro árbol.
¿Por qué parece que vuelan?
Sus saltos acrobáticos a menudo abarcan 45 metros, y algunas especies abarcan casi 90 metros en un solo deslizamiento, algo que puede hacernos creer que en realidad sí vuelan. Son unos animales muy ágiles y recordemos que la ardilla promedio apenas pesa unos 330-450 gramos. Su tipo de cuerpo y peso viene determinado por el tipo de hábitat en el que sobrevivan.
Otras curiosidades
- Sus dientes frontales nunca dejan de crecer. Las ardillas tienen cuatro dientes frontales que crecen continuamente a lo largo de su vida, a una velocidad aproximada de 15 cm por año.
- Nacen ciegas. Al igual que otros mamíferos, no empiezan a servirse de los ojos hasta poco después de nacer. Estas dependen de sus madres alrededor de dos meses mientras les traen alimentos y les dan de mamar. De adultas, tienen una visión perfecta.
- Aprenden muy rápido. Un estudio de la Universidad de Exeter demostró que las ardillas grises aprenden rápido y son capaces de adaptar tácticas para mejorar la eficiencia de la localización de alimentos.
- Reconocen las nueces maduras con el olfato. Aunque también pueden saber si los gorgojos han ahuecado una bellota o avellana al reconocer que la nuez es demasiado liviana.
- Usos de la cola. Funciona como manta en el invierno y como sombrilla en el verano. La cola también les ayuda a equilibrarse, pero también la usan como medio de comunicación. Se utiliza como dispositivo de señalización y las mueven si sospechan una amenaza.
- Pueden mentir. Un estudio llevado a cabo en el 2008 demostró que las ardillas, al sentirse observadas por otras de su especie, cavaban un hoyo falso y fingía depositar una nuez en él, pero en lugar de eso, se la metía en la boca y esperaba enterrarla en otro lugar.
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Autor: I.S. con información de Muy Interesante
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