Levanta la mano si te aburres en clase

O como no podemos verte la mano, dale al botón “me gusta” de tu Facebook… Mira. El mundo ya no es el que era cuando se crearon los patrones que rigen la educación actual. Ha cambiado esencialmente todo el ecosistema educativo y también hemos cambiado nosotros, los estudiantes. Por lo tanto los profesores y los que diseí±an estrategias para transmitir conocimiento (eso es enseí±ar) deberí­an adaptarse a los cambios o simplemente el objetivo de su actividad estará frustrado: no nos alcanzarán, no “llegarán” a nosotros.





En “Menos deberes y más videojuegos” os contamos que las íºltimas investigaciones sobre aprendizaje demuestran que hay más posibilidades de formar las capacidades perceptivas, la coordinación o la creatividad (uno de los valores al alza en el momento actual no sólo en lo educativo sino también en lo laboral), usando videojuegos que con el modelo “profesor que expone desde el píºlpito – alumnos pasivos que se limitan a escuchar” en el que se encajan la mayorí­a de las aulas a las que acudimos todos a diario.

Si los videojuegos forman parte de nuestro hábitat intelectual habitual y además entrenan nuestras competencias de forma más eficaz que el modelo educativo tradicional, ¿por qué no ir introduciendo ciertos cambios en el aula a favor de estas plataformas y considerarlas solo un poquito más “vehí­culos de motivación para los alumnos”. Sixto Arias, en un reciente artí­culo en Yorokobu, nos hizo pensar con estas palabras:

“…Encerrar a uno de estos multipresionadores de botones y activadores de joysticks compulsivo en un aula de cincuenta o sesenta metros cuadrados, a media luz o luz completa, con el impacto visual de una tiza sobre una pizarra y con una performance de un seí±or o seí±ora sentado en una silla raí­da pasando páginas, durante horas y horas, dí­as, semanas, meses… debe ser el equivalente a introducir una piraí±a en una pecera rebosante de sangre fresca con una pinza en la boca. Insoportable, insufrible…”

¿No es un poco contradictorio que luego las empresas busquen gente con talento, creatividad, frescura, capacidad de innovación, ideas interactivas, motivación… y encuentren personas aleccionadas en estructuras de enseí±anza que se han encargado de domesticar o incluso hacer desaparecer cada una de esas habilidades? ¿Se estimula nuestra curiosidad?

No te vamos a decir que te lleves la Play, la Xbox o la Nintendo a clase. Tu profesor lo tomarí­a como un acto de rebeldí­a, una falta disciplinaria sancionada por la normativa de tu instituto o colegio. Pero es verdad que algunas de las experiencias de aprendizaje que necesitarás para triunfar en el modelo laboral del maí±ana no están en las aulas ahora mismo, por lo que te tocará buscarlas por tu cuenta. ¿No esperarás que el staff educativo, los pedagogos y los profes vayan a hacer caso al Rincón del Vago? ¿no?

Por otra parte no se trata solo de eso, de meter más gadgets en clase para atrapar la curiosidad del alumno y luego guardarla en una cajita. La pizarra interactiva es un gran aparato. Esta tiza electrónica es, en efecto, un invento curioso. Pero si la clase sigue teniendo la misma disposición jerárquica y todo va encaminado a escuchar pasivamente una charla sin aditivos ni visos de calarte hasta la médula… ¿qué te vas a llevar de ahí­ para el futuro además de un buen tocho de apuntes que subir a tu Rincón del Vago favorito? :)

En este blog iremos liberando ideas innovadoras para que tus estudios no se queden anquilosados y para que adquieras competencias sin tener que estudiar gruesos mamotretos ni retener filas de tediosos datos: todo está en Internet para que vuelvas a ello cuando quieras, sin sobrecargar la memoria. Sólo hace falta que nos enseí±en a saber manejar estas fuentes de conocimiento y soportes tecnológicos para que seamos excelentes a la hora de encontrar la información que necesitamos y saber aplicarla correctamente. Y que en el proceso no nos amuermemos…

¿Lo lograremos?

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